En un mundo donde la calidad del agua potable se ha convertido en una preocupación creciente, el agua de manantial emerge como una alternativa natural que ha permanecido intacta durante siglos, filtrada lentamente por capas de roca y sedimentos que actúan como purificadores naturales.
Esta hidratación natural no solo ofrece una experiencia de sabor incomparable, sino que también proporciona minerales esenciales que nuestro cuerpo necesita para funcionar de manera óptima. Rica en calcio, magnesio y otros elementos vitales, el agua de manantial representa mucho más que agua: es un regalo directo de la naturaleza que combina pureza, sabor y beneficios nutricionales.
Qué es al Agua de Manantial
Generalmente cuando nos referimos a manantiales estamos hablando de flujos de agua continuos que provienen de corrientes subterráneas. Cabe destacar que cuando vemos un río o un riachuelo lo podemos observar de un determinado tamaño, pero por norma general estas dimensiones se multiplican bajo tierra, es decir una cosa es lo que vemos desde la superficie y otra bien distinta su tamaño real. Esto se debe al ciclo natural del agua, ya que cuando caen precipitaciones en forma de lluvia, hielo o nieve, esta al llegar al suelo se va filtrando por las diferentes capas que tiene la tierra formando canales subterráneos.
En ocasiones estos canales crean un lago subterráneo o acuífero y cuando ya no puede acumular más agua se desborda. Por ello existen manantiales de los que brota el agua durante todo el año, pero también existen otros de los que solo sale agua de manera estacionaria o cuando hay un exceso de precipitaciones.
No obstante, para hablar de un manantial, este tendrá que cumplir una serie de características.
Características del Agua de Manantial
El agua de manantial es conocida por su pureza y sus propiedades únicas, que la convierten en una de las opciones más valoradas para el consumo humano.
Vemos sus características:
Origen Natural
Ni que decir tiene que hablamos de manantiales que brotan por sí mismos, sin que haya habido una intervención humana. Diferente es que luego se haya canalizado la salida e incluso se haya puesto un grifo para facilitar la captación de agua, pero en ningún caso se trata de un canal artificial como los que se construye para el riego.
Rica en Minerales
Al tratarse de aguas subterráneas, como hemos explicado por el propio ciclo natural del agua, son aguas que han atravesado diferentes capas de suelo absorbiendo a su paso los minerales que ha ido encontrando a su paso. Recordemos que el agua es el disolvente por excelencia. Por este motivo los minerales contenidos de un manantial a otro pueden variar en su cantidad y en su composición, ya que dependerá en gran medida de la orografía del terreno.
Pureza y seguridad
Al haber atravesado diferentes capas de tierra el agua ha ido pasando por un filtro natural de manera que se garantiza su pureza. En algunos casos el hombre para tratar el agua ha emulado a la naturaleza y ha utilizado filtros de barro lo que conseguirían un efecto similar. Además materiales como el barro o la cerámica tienen propiedades bacteriostáticas lo que asegura una baja presencia de microorganismos y por tanto patógenos. Sin embargo, este último punto es importante, ya que deberíamos asegurarnos de que está totalmente libre de peligro.
Algunos ayuntamientos que cuentan con aguas de manantial en sus municipios realizan controles de calidad de forma periódica de manera que garantizan su calidad y salubridad y lo anuncian en un cartel junto al manantial para mayor tranquilidad de sus ciudadanos
Libre de tratamientos químicos
Al tratarse de algo natural ya podemos imaginar que no se añade nada al agua que no lleve en origen, esto incluye todo tipo de productos químicos como el cloro.
¿Es saludable beber Agua de Manantial?
Cuando pensamos en un manantial a todos nos viene la idea idílica de un arroyo discurriendo entre las montañas y la vegetación, y la imagen de un muchacho o muchacha que se arrodilla junto al manantial para beber agua con la ayuda de sus manos.
Esta imagen digna de un cuadro de los mejores impresionistas de la época, no deja de ser eso, una imagen idílica pero irreal.
La respuesta a si es saludable o no beber agua de manantial es que depende del manantial. Ya hemos hablado del ciclo del agua pero lo que no hemos dicho es que antes de llegar a la corteza terrestre el agua ya puede estar contaminada, pensemos en los humos y contaminantes que expulsamos a la atmósfera o a los perniciosos efectos en la lluvia ácida. Una vez que llega a la corteza terrestre, el agua va disolviendo todo lo que encuentra a su paso, es decir si encuentra terrenos calcáreos, sería un agua con cal, si encuentra yacimientos de hierro, será un agua con un alto contenido en hierro. Además, el agua irá recogiendo todo lo que encuentre a su paso, no solo los minerales y los metales pesados, nos estamos refiriendo por ejemplo a los desechos vegetales que utiliza la industria para su producción, los abonos y fertilizantes que utilizamos para cultivar la tierra…
Como podemos imaginar, la calidad de esa agua dependerá mucho de por dónde haya pasado, si hay industrias cerca, si es un agua que se encuentra en lo alto de una montaña y proviene en gran porcentaje del deshielo…
En ocasiones pensamos que por ser un agua que se encuentra en lo alto de una montaña debe tener una calidad suprema, sin embargo, pensemos en la contaminación atmosférica, ya que incluso una nube situada encima de un polígono industrial podría viajar hasta una montaña y descargar allí, por lo que el agua podría estar contaminada.
Por todas estas razones, tanto la orografía como el lugar donde se ubique el manantial son de una enorme importancia a la hora de hablar de la calidad.
Qué diferencia hay entre Agua Mineral y Agua de Manantial
Las tan valoradas aguas minerales tienen un origen natural al igual que los manantiales. Desde ese punto de vista podríamos decir que se trata de lo mismo, de hecho, muchas aguas minerales provienen de manantiales. Sin embargo, las minerales al tener que estar embotelladas pasan por un tratamiento, aunque sea mínimo, de filtración para garantizar su potabilidad.
Podríamos decir que todas las aguas minerales que se comercializan son potables, mientras que cuando bebemos directamente de una fuente o manantial, aunque las propiedades puedan ser similares, no podemos tener la garantía absoluta de que se trate de un agua potable.
Por ello la conclusión es que la gran diferencia está en los controles, que sí están presentes en las aguas minerales y por tanto una calidad más estable, ya que la calidad de los manantiales puede variar estacionalmente.
¿Es mejor el Agua de Manantial que el agua del grifo?
En principio podríamos decir que sí, al tratarse de un agua sin químicos y que ha sido purificada de una manera natural. Sin embargo insistimos en el hecho de que el agua de manantial debe pasar por algún proceso de control de calidad que garantice su potabilidad.
Estos controles deben ser además lo más recientes posibles ya que al no tener cloro es susceptible de contaminarse más fácilmente por microorganismos. Más todavía cuando estas aguas son recogidas en garrafas a partir de excursiones ex proceso, lo que al principio nos puede parecer una buena idea se puede convertir en una pesadilla si no tomamos las precauciones necesarias.
Cómo se garantiza la calidad y pureza del Agua de Manantial
La calidad se garantiza mediante dos tipos de análisis:
- Físico-químicos: donde se valoran la cantidad de minerales y metales que lleva el agua, así como sus condiciones organolépticas, es decir color, olor, turbidez…
- Bacteriológicos: donde se detecta la presencia de bacterias y patógenos en el agua.
Lo importante es que estos análisis sean periódicos ya que, como hemos comentado antes, la calidad de un manantial puede fluctuar. Además, los análisis bacteriológicos deben tener una periodicidad mayor.
Normalmente son los ayuntamientos, que cuentan con manantiales dentro de sus municipios, los que se encargan de velar por su seguridad.
Beneficios del Agua de Manantial
Los beneficios del agua de manantial que se le suelen atribuir son los siguientes:
- Pureza natural: ya que al provenir de corrientes de agua naturales no tiene los productos químicos que se usan para tratar el agua
- Minerales esenciales: puede contener calcio, magnesio…que ayudan a fortalecer los huesos y el sistema nervioso
- Beneficios organolépticos: son muchos quienes aprecian la frescura y el sabor a “naturaleza” de este tipo de aguas.
- Propiedades digestivas: algunas de estas aguas son ricas en bicarbonatos lo que neutraliza la acidez gástrica.
Dónde se puede comprar
El agua de manantial se puede conseguir de diferentes formas:
- Supermercados y tiendas: son muchas las marcas que embotellan aguas que provienen de manantiales reconocidos. Estas aguas pueden ser adquiridas en las propias tiendas físicas o bien a través del comercio online.
- Directamente de los manantiales: también están los que deciden ir a los manantiales cargados de garrafas para hacer acopio de una manera directa
- Instalando una depuradora de agua: las empresas de tratamientos de agua suelen disponer de una amplia gama de depuradoras, algunas de las cuales pueden transformar el agua del grifo en un agua prácticamente de manantial o que al menos reúna la mayor parte de sus beneficios.
Cómo disponer Agua de Manantial en casa
Para tener agua de manantial en casa, se puede recurrir a todos los elementos que acabamos de nombrar, si bien nuestro consejo es poner una depuradora en casa de esta manera conseguimos:
- Seguridad: ya que es un agua controlada permanentemente a diferencia de la que podamos recoger en un manantial
- Comodidad: nada como abrir el grifo de casa y obtener un agua de calidad
- Economía: siempre va a resultar más económico que comprar agua envasada.
Si estás interesado o tienes alguna cuestión de cómo disponer de agua de manantial en casa no dudes en contactar con nuestro equipo de ósmosis inversa en Zaragoza.
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